Porque el tamaño en la política ¡SÍ IMPORTA! Sistema D’HONT y Ley de causa y efecto
Esta ley nos ayuda a comprender
que cada acción que realizamos, cada decisión que tomamos, por más mínima que
sea, tendrá un efecto, que puede ser bueno o malo, depende. En este punto,
quiero mencionar que, para mí, en este plano físico, la fuerza que rige y
traspasa cada acción y decisión, es la política. ¿Y por qué la política se
preguntarán? Porque la política está presente en nuestras vidas desde que
nacemos, hasta que morimos. En toda nuestra historia. La política no es solo la
“partidaria” es más profunda. Que hoy podamos estudiar, trabajar, comer, tomar
agua saneada, vacunarnos, estar conectados, tener una casa, participar, tener
comisiones vecinales, denunciar, manejar, etc., se debe a que tenemos políticas
que rigen esas acciones, esos derechos básicos. Y que alguien o algunos,
tomaron la decisión o lucharon por esos derechos en un tiempo a esta parte.
En nuestro estado “democrático”,
los partidos políticos cumplen la función de ser “herramientas” para que, a través
de su representación en los espacios de decisión, sus decisiones “políticas”
puedan servir para “mejorar” la calidad de vida de las personas. ¿Pero
realmente sirven? Como ciudadanía, tenemos el poder de decidir cómo queremos
seguir construyendo el país que queremos. Tenemos el poder de tomar las mejores
decisiones, de elegir a quienes realmente nos representen, y que, en un futuro,
nuestras decisiones de hoy, sean positivas para nuestra vida.
Y al fin, después de esta breve
reflexión, tenemos que hablar de números y usar la matemática para entender por
qué el tamaño sí importa en la política. Vamos a analizar cómo funciona la
distribución de los escaños o bancas, y vamos a entender por qué pa nuestro
voto SÍ suma. Aunque, como siempre digo, votar no es la única forma de
participar en la política, pero sí la forma de decidir sobre qué tipo de
personas queremos que representen nuestros intereses ocupando esos espacios de
decisión.
En Paraguay, usamos el sistema
DHONT, que es el sistema de distribución proporcional. Una vez que tengamos los
resultados de las elecciones, procedemos a hacer el cálculo. Como saben, el
partido que recibe la mayor cantidad de votos, es el partido que va a llevar la
mayor cantidad de bancas. ¿Y cómo saber cuántos votos se necesita para poder
ganar al menos una banca?
Primero, tenemos que revisar los
resultados de las elecciones anteriores, en este caso, solo voy a mostrar los
resultados del 2015.
Podés verlo en este vídeo desde el minuto 04:56
También, el
nuevo sistema de listas cerradas-desbloqueadas, fortalece a los partidos
tradicionales, y anula aún más la representación de las mujeres en la política.
Ocasionando que, se siga perpetuando la histórica presencia masculina.
FE DE ERRATAS: En el minuto 05:00 donde se habla de los resultados de la intendencia y concejalía, en la columna de electores, la cantidad de 71.450 corresponde a la gente habilitada para votar, no a la gente que fue a votar. De esta cantidad habilitada, solo participaron 36.232, es decir, el 50.71% de electores habilitados.
Los votos nulos y blancos tienen una connotación de disconformidad con las representaciones propuestas, sin embargo, no suman y fomentan la división y debilitamiento de votos. No sirven finalmente.